Home  

Presentación

Estos últimos meses han estado marcados por dos series de hechos importantes en el plano mundial: por una parte, la profundización de la crisis que, de financiera y bursátil en un primer momento, gana poco a poco al conjunto de la economía y, por otra parte, una agudización marcada de las tensiones imperialistas que imponen a cada capital nacional, a cada burguesía, instaurar, en función de sus medios, las medidas que le permitan defender lo mejor posible sus intereses imperialistas por todo el mundo.

Para las minorías comunistas, las responsabilidades que se desprenden de esta situación son por supuesto importantes. Les corresponde aportar a su clase un análisis claro y coherente de lo que está en juego en la situación, de destacar las perspectivas que permitan avanzar hacia la solución proletaria y revolucionaria del atolladero capitalista, pero también intervenir en el seno de la clase -en la medida de sus capacidades y posibilidades abiertas por las reacciones obreras- para destacar concretamente estas perspectivas. El boletín de nuestra fracción -y este número en particular- se fija estos objetivos.

El lector podrá constatar que se ha reservado un lugar importante en este número a los Comunistas Internacionalistas de Montreal (CIM): un volante elaborado y difundido en colaboración con la Fracción, correspondencia entre los CIM y dos grupos del campo proletario (BIPR y CCI) y finalmente un artículo que denuncia las campañas burguesas de división de la clase obrera entre “nacionales” e inmigrantes. Este último documento nos parece tanto más interesante por cuanto la cuestión no concierne únicamente a la clase obrera de Canadá, sino al conjunto del proletariado.

Publicamos también extractos de un artículo del PCI, publicado en su periódico “Le Prolétaire” nº 486 de octubre/noviembre 2007. Queremos saludar aquí el hecho de que un grupo político ligado a la Izquierda comunista aunque generalmente poco inclinado a llevar a cabo polémicas con otros grupos políticos, se compromete en la vía del combate contra el oportunismo, en particular el que arrastra la organización de la que hemos salido, la CCI.

Nos parece importante subrayar que el necesario reagrupamiento de las magras fuerzas militantes comunistas pasa por la lucha sin piedad contra la influencia de las ideología extrañas al proletariado, contra el oportunismo, contra la influencia de la ideología burguesa sobre las minorías revolucionarias. Este combate es, y será cada vez más, una necesidad vital para ir hacia la constitución de la indispensable herramienta política de la clase, el Partido comunista.

Por su parte, la Fracción está comprometida en este combate y lo seguirá estando.

La Fracción, febrero 2008.


Boletín Comunista 42 - FICCI