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Fue tardíamente que supimos acerca del deceso de la camarada Clara.
Primero, queremos expresar nuestras condolencias a su familia y a quienes constituyen su “familia de adopción”, RV y Taly.
Pero Clara era ante todo una militante.
Alrededor de siete décadas de áspera lucha en la defensa de los intereses de nuestra clase; esto no es muy frecuente.
No volveremos a trazar aquí el recorrido militante de la camarada, digamos únicamente que inicia antes de la segunda guerra mundial, continúa durante la guerra, momentos de derrota y retroceso particularmente duros para nuestra clase y sus expresiones políticas.
Ella era, probablemente, una de las últimas representantes de esas generaciones que nos transmitieron las adquisiciones de la oleada revolucionaria de principios del siglo pasado. Ya tan sólo por esta razón le debemos todos, cualquiera que sea el uso que seamos capaces de hacer de esas lecciones, estima y reconocimiento a Clara.
Pero es también la manera de transmitir esas adquisiciones, su trato simple y abierto, su calidez y profundidad de convicción, lo que Clara imprimía en los jóvenes camaradas que éramos en la época.
Desde hace algunos años ya no veíamos a Clara con frecuencia. No a causa nuestra, ni suya, lo sabemos. Su puerta nos estaba vedada por motivos sórdidos, sobre los cuales no diremos nada en esta circunstancia.
Sabemos que Clara había conservado su estima hacia nosotros, a pesar de las vicisitudes de la hora. Esto es también una característica de aquélla generación de combatientes comunistas.
Por nuestra parte, Clara, no hemos olvidado esas lecciones, y no las olvidaremos.
Continuamos el combate de la Izquierda comunista y lo continuaremos, contra viento y marea.
Adios Clara. Tu recuerdo nos ayudará a continuar la lucha.
La Fración Interna de la CCI.
Publicamos a continuación el homenaje que el camarada Olivier rinde a la camarada Clara, de quien acabamos de conocer su deceso. Nos asociamos a este homenaje a una camarada con quien militamos durante décadas en el interior de la CCI. No solamente tuvimos relaciones fraternales y de respeto hacia la militante comunista, sino también apreciamos su calidez, su gentileza natural y el recibimiento que reservaba a todos los que la visitaban. Tenemos también un pensamiento entristecido para su familia, a quien presentamos nuestras condolencias más sinceras.
La fracción interna de la CCI, 21 de abril de 2006.
P.D.- El camarada Olivier ha leído este homenaje durante el sepelio de la camarada el 22 de abril.
Clara era una camarada; es suficiente y todo para mí y algunos más. En efecto, el simple término de camarada está cargado, para mí, de un gran significado y es por lo que estoy aquí esta mañana.
Lo que caracterizaba a Clara era:
- La sencillez de una larga vida de militante comunista sin desfallecer (88 años). Una vida sin traición a la causa internacionalista. Esto no es tan frecuente en el movimiento obrero, para no olvidar señalarlo.
- Pero sobre todo una atención, una presencia y una amistad sólida para todos los que eran considerados como revolucionarios.
Deseo recordar aquí este aspecto, que es el signo de una grandísima humanidad comunista que trasciende todas las querellas políticas.
Es este último rasgo de carácter el que quisiera modestamente recordar. Cada vez que yo la visitaba estos últimos años, e incluso recientemente, ella me solicitaba noticias sobre camaradas con quienes no podía ya reunirse porque eran considerados “bribones” o “auxiliares de la policía” por la CCI.
Lamento mucho no haberla visto nuevamente estos últimos meses, mientras que, con insistencia, ella me había solicitado verla. ¿Quería decirme algo? Jamás lo sabré. Para verla, en efecto, era necesario hacer una cita, para no encontrarse con la CCI que le prohibía estos encuentros furtivos conmigo y algunos otros.
Clara, no te olvidaremos. Continuamos el combate, tu combate.
Olivier.
Fracción interna de la CCI - Boletín 35