---

Editorial : Hacia el reagrupamiento

El Boletín Comunista Internacional nº 11 que ahora presentamos es un boletín de «transición», a la espera de una nueva publicación con la que se dotará el grupo político que los Comunistas Internacionalistas – Klasbatalo (que también publican este número sobre su blog) y nuestra Fracción de la Izquierda Comunista Internacional (Ex Fracción Interna de la CCI) han decidido construir y constituir tras su fusión. En efecto, desde hace ahora seis meses estamos comprometidos en un proceso de reagrupamiento, con vistas a constituir un grupo internacional e internacionalista basado en las posiciones y en la experiencia de la Izquierda Comunista internacional. Este proceso es necesariamente prolongado si queremos asentar y asegurar tanto como se pueda la solidez y la claridad política de esta nueva organización, en tanto que los dos núcleos tienen historias y experiencias políticas un poco diferentes. La apertura de este proceso fue anunciado en el Boletín Comunista Internacional nº 10 (febrero de 2013), a continuación de la conferencia de los camaradas de la fracción. El lector puede recorrer los sumarios de los diferentes números, así como los del Boletín de la Fracción Interna de la CCI (http://www.fractioncommuniste.org ) y el blog de CI-K (http://klasbatalo.blogspot.fr/), para tener una idea del desarrollo de los contactos, de las discusiones y los debates, de nuestros pasados desacuerdos y las convergencias, colaboraciones e intervenciones comunes desde 2007 (ver el Boletín 41 de la FICCI, 2007).

El momento para formalizar este reagrupamiento se acerca, y se materializará en la celebración de una conferencia de constitución del nuevo grupo. Estamos en el camino de adoptar una «plataforma», cuyas principales posiciones son muy próximas a las de la TCI y de la CCI «histórica». Seguimos con la discusión y la clarificación de las cuestiones de organización y de funcionamiento sobre la base de la experiencia de la Izquierda comunista, muy especialmente de la tradición de la Izquierda «italiana». Nuestra orientación y nuestra actitud política ante otras fuerzas comunistas y del campo proletario está en pleno proceso de clarificación ¹, y estamos discutiendo un documento de análisis sobre la situación histórica internacional actual, a fin de poder definir las orientaciones políticas mas claras y mas eficaces posibles. Así, dispondremos de los documentos programáticos suficientes para la fundación y la constitución de un grupo comunista basado en la experiencia de la Izquierda comunista, reivindicando su herencia política y cuya orientación central es funcionar y participar de la mejor manera posible en el reagrupamiento en torno a la Tendencia Comunista Internacionalista.

Como ya hemos dicho, «nuestra perspectiva de reagrupamiento, de formación de un nuevo grupo, con los camaradas, se situa totalmente en la perspectiva de reagrupamiento alrededor de la TCI; claramente, no se trata de crear un polo «alternativo», ni mucho menos una organización "en competencia" con la TCI, sino en cualquier caso en torno a la TCI, en apoyo a esta. Estamos convencidos de que presencia de nuestra corriente histórica² al lado de la TCI es una baza para el combate por el partido del futuro» (Presentación del Boletín Comunista Internacional 10 ). El combate teórico, político y práctico para desarrollar la vía hacia la construcción del partido mundial del proletariado es la orientación y la tarea principal y mas importante de los grupos comunistas de hoy. Por extraña, por ilusoria o incomprensible que resulte a los ojos de la gran mayoría de individuos y trabajadores – por no citar mas que los «mas interesados» en este problema, e incluyendo entre ellos los individuos y las fuerzas revolucionarias - la cuestión de la lucha de clases y la revolución, la lucha por el partido, y con ella el reagrupamiento de las fuerzas comunistas, es la cuestión histórica esencial actualmente, de la cual dependen los resultados de las confrontaciones de clase que se anuncian.

El agravamiento de la crisis económica y la parálisis histórica del capitalismo que llevan a la guerra generalizada, obliga al capital mundial a atacar de forma continua, cada vez mas, al proletariado mundial tanto en sus condiciones de vida y de trabajo como en el plano ideológico, a fin de hacerle pagar la crisis, la preparación de la guerra imperialista, comprometiéndole en esta a continuación. La burguesía libra una guerra de clase que no puede mas que desembocar en enfrentamientos masivos entre estas, a nivel mundial y de dimensión histórica, en un proceso de lucha de masas internacional que ya ha comenzado ³. La realización de esta dinámica no depende de los revolucionarios. No pueden ser un factor determinante, incluso aunque tengan un papel que jugar. Por el contrario, y ahí es donde tienen un papel principal e indispensable, el resultado de los conflictos estará determinado por la capacidad del proletariado para desarrollar y asumir la confrontación política con el estado capitalista y sus fuerzas políticas y sindicales a fin de evitar los retrocesos y el sabotaje de sus combates, haciendo lo mas eficaz posible estas luchas y causando el retroceso de la burguesía, abriendo la puerta a una situación revolucionaria. Es precisamente por esta dimensión política esencial del combate de clase por la que el proletariado necesita y crea, históricamente, minorías políticas, como expresiones de su conciencia de clase, a fin de que las mismas jueguen el papel dirigente y de vanguardia política indispensable para esta lucha política clasista, cuya finalidad solo puede ser la destrucción del capitalismo mediante el ejercicio de la dictadura del proletariado.

Para los comunistas de hoy, que reivindican la Izquierda comunista, la cuestión central y prioritaria es por consiguiente la de trabajar en pro del reagrupamiento de las fuerzas revolucionarias alrededor del programa comunista y de las organizaciones que han permanecido fieles a él, y que lo representan. Es decir, alrededor del polo político y organizativo que representa la Tendencia Comunista Internacional por su historia, su patrimonio teórico, sus posiciones políticas, y su organización internacional. Nuestro reagrupamiento y la constitución del nuevo grupo, no permitiendo nuestras divergencias políticas adherirnos hoy a la TCI, es un momento de este proceso, y debe ser factor activo en este combate por el partido del mañana, en el que seguimos pensando que la TCI tiene una responsabilidad y un papel central a desempeñar; responsabilidad y papel que pretendemos ayudar y favorecer con lo mejor de nuestras fuerzas, desde nuestros puestos.

Los CI-K y la FGCI, Septiembre de 2013

---